El
dolor de cabeza o cefalea es una de las quejas más frecuentes. ¿Quién no lo ha
sufrido alguna vez?. Sus
causas son variadas, lo que unido a la subjetividad del síntoma hace que el
diagnóstico sea complicado, a veces. Por ello, su neurólogo le realizará muchas
preguntas para poder diagnosticar el tipo exacto de cefalea que padece; no se
desespere, es en su beneficio.
Las
cefaleas se clasifican, en base a su causa, en dos grandes grupos: las cefaleas
primarias (su causa es desconocida) y las secundarias (son
aquellas atribuidas a otra enfermedad, lesión o substancia química). Como
ejemplo de las primarias, podemos citar la migraña o jaqueca (que son términos
sinónimos) y la cefalea tipo tensión,
por ser las más frecuentes de este grupo. Cefaleas secundarias son, por
ejemplo, la debida a meningitis, tumores intracraneales, hemorragias, traumatismos
craneales, sinusitis aguda y por efecto secundarios de fármacos.
La
labor principal de su neurólogo será, en primer lugar, descartar una causa
secundaria grave de su cefalea y posteriormente diagnosticar el tipo exacto
para así emitir un pronóstico e iniciar un tratamiento adecuado.
Afortunadamente la mayoria de la cefaleas son primarias y por tanto ni siquiera será necesaria la
realización de pruebas complementarias de diagnóstico (TAC, Resonancia).
Aún
persiste la falsa creencia de achacar el dolor de cabeza a problemas de visión,
sinusitis crónicas y a la artrosis cervical, aunque lo cierto es que rara vez
estas son las causas reales.
Sin
duda, una de las cefaleas más frecuentes es la migraña o jaqueca, ya que
el 17% de las mujeres y el 7% de los hombres la padecen. Se caracteriza por
crisis periódicas de dolor moderado o intenso de entre 1 a 3 días de duración,
que migraña con aura. Aunque no es una enfermedad grave, sí que
puede afectar considerablemente la calidad de vida.
se localiza más frecuentemente en uno de los lados de la cabeza y que suele
asociar nauseas/vómitos, intolerancia a la luz, al ruido y a la actividad física.
En una minoría de pacientes el dolor es precedido por síntomas transitorios
visuales o sensitivos, la denominada
Actualmente
no existe tratamiento curativo para la migraña aunque sí existen medicamentos
que alivian rápidamente el dolor y otros que reducen la frecuencia de las
crisis en caso de que ésta sea elevada. Los fármacos más eficaces para aliviar
el dolor se denominan genéricamente triptanos y existen varios con características
parecidas (eletriptán, rizatriptán,
zolmitriptán, etc). En caso de precisar de un tratamiento para reducir el
número de ataques su neurólogo le prescribirá el más adecuado, teniendo en
cuenta las características de cada paciente. Los fármacos preventivos de la
migraña más usados son: betabloqueantes, flunarizina, topiramato y
antidepresivos, que serán tomados durante periodos de 6 meses.
Como
último consejo, en caso de que sufra de dolor de cabeza, evite
automedicarse y consulte con su
neurólogo que le diagnosticará y le aconsejará sobre el mejor tratamiento.